jueves, 12 de febrero de 2009

EL QUIJOTE y de cautivos, de presos y de justicia


Grupo de lectura de El Quijote.


Bueno...llegamos a los números redondos: capítulo XL... todo un éxito... son 40 semanas... y de nuevo un capítulo de corte belicoso, lleno de historia y autobiografía. Sin duda señalado por la ingrata vivencia de Cervantes en la cárcel, en cautividad o por su relación con la justicia, o un poco de todo. Si hoy es duro vivir en la cárcel, en el siglo de Oro las condiciones seguro que no eran muy humana... serían cualquier cosa menos "estancias corregidoras de malos hábitos". Hasta tres veces estuvo entre rejas Don Miguel, y a punto de una cuarta... bueno en lugar de "entre las rejas" podemos decir en la cárcel, en cautiverio.... o por buscarle relación a lo que acontece en el capitulo: Cautivo

* En 1569 existe constancia de un mandamiento judicial en el que se procede contra un tal Miguel de Cervantes, ausente y en rebeldía (huido), acusado de haber herido a un tal Antonio de Sigura, por lo que se le condena "a que con vergüenza pública le fuese cortada la mano derecha, a destierro por diez años y otras penas". Hay cervantistas que apuestan a que es otro Cervantes... pero parece que está documentado que Cervantes aparece tres meses después en Italia pidiendo de Madrid un documento en que se demuestre la limpieza de sangre...y por lo tanto su hidalguía. Los hidalgos no podían ir a la cárcel...

*Desde 1575 a 1580...Cautivo realmente, pero por ningún delito ... fue hecho prisionero... ya daremos cuenta de sus aventuras en Argel... de adelanto los capítulos éste y el anterior.

*En 1592 fue encarcelado en Castro del Rio (Córdoba), por haber vendido trigo sin permiso. Veamos, Cervantes trabajaba de "requisador" de alimentos y productos para la Armada Invencible y parece que vendió parte de lo recaudado... estuvo en la cárcel pero poco tiempo, pues pagaron su fianza.

*En 1597 de nuevo ingresa en la "penitenciaría" debido a que en esta época es recaudador de impuestos, y al quebrar un banco de Sevilla, perdió lo que allí tenía depositado. Aquí pasó 5 meses.

*En 1605 muere ante la puerta un caballero navarro, y las mujeres de su familia lo socorrieron... un juez por lo visto algo arbitrario mandó que Cervantes y toda su familia ingresaran por unas horas en la cárcel.

Don Miguel no tuvo mucha suerte con la justicia en la su vida, quizá uno de los motivos que influirán en su Quijote y en la elección de don Alonso por hacer de salvapatrias de las causas perdidas... menos mal que ahora por lo menos le hacemos justicia.

13 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

En efecto, el pobre don Miguel sufrió los avatares de la justicia en sus propias carnes. Debió ser muy duro lo de Argel. Tanto que lo llevo varias veces a sus textos, quizá para sortear sus propios fantasmas.
(¡¡40 semanas ya, querido Manuel, 40!!)

Pedro J. Sabalete Gil dijo...

Sin duda el peor de todos es el cautiverio en Árgel. Cuando me documenté para un escrito (La torre de las calaveras) me quedaba lívido comprobando las condiciones en las que trataban los piratas berberiscos a sus cautivos. No valían nada si no les pagaban el rescate. Nada que ver con la imagen romántica y maja del cine de hoy.

Quizás por eso, Cervantes, amara tanto la libertad.

Abrazos.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Coincido con todos vosotros.

El cautiverio de Argel debió de marcarlo enormemente. Que pena de vida la suya...

Un abrazo.

Merche Pallarés dijo...

Como dice Pedro ¡¡40 semanas!! No me lo puedo creer...y dar gracias a los dioses de que YO no haya "estirado la pata"...
¡Pobre Cervantes! (¿seguro de que era el mismo?) que estuviera preso por tantas cosas...además lo que más me entristece es saber que era otro corrupto... ¿Es que los españoles no teneis arreglo? (Digo "teneis" porque aquí, yo me considero canadiense...). Besotes, M.

Anónimo dijo...

Sí señor, número redondo, como redonda te ha quedado la entrada, como los 40 principales, Alí Babá y los 40 ladrones, Quien pillara los 40… Cervantes genio y figura. Quizás fueran sus estancias en la cárcel las que le dieron el sosiego necesario para escribir lo que escribió. pancho

Anónimo dijo...

Miguel de Cervante no tuvo suerte con la justicia o la injusticia. Sin duda, todo lo vivido le aportó mucho a la hora de escribir su obra magna "El Quijote". Un abrazo.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Pedro Ojeda: en toda su obra se ve..ya dijimos que fue un hombre de armas a tomar...o 10 meses...ya mismo el primer aniversario.

goathemala: pues verdaremante no han cambiado mucho desde aquellas cárceles otomanas a las de ahora por esos lares.....

Cornelivs: un canto desesperado es lo que se ve en esos relatos..

Merche: exageradilla con lo de la pata digo... hombre corrupto no...lo que si pasaba era mucha hambre y necesidades...y la tentación era la tentación...

Pancho: aunquesigo escuchando los 40...ya algunos los dejamos atrás...desde luego la cárcel debió de hacerle pensar muchos rios de tinta.

fernanado: sin duda...autobiografía pura y dura...

Saludos

Alatriste dijo...

Aunque ahora tengo parada la lectura espero recuperarla pronto, además recuerdo perfectamente esta historia.

Desde luego Don Miguel de Cervantes fue carne de presidio por aquel entonces, ¡todo un granujilla!

Saludos Tuccitano.

Teresa dijo...

Es curioso. La orden de busca y captura fue una premonición.

Silvia_D dijo...

Cuando empezamos la andadura me parecía mentira haberme metido en tal empresa. Había intentado leer el Quijote tropecientas veces y siempre misión imposible.

Desde luego, sabiendo algo de la vida de Cervantes, se entienden mucho mejor parte de sus textos.

Besos

Abejita de la Vega dijo...

Sigamos haciéndole justicia, sigamos con los capítulos.
Me incorpore tarde, ya lo siento...
Un abrazo, Tucci

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Alatriste: se te añora amigo...¿para cuando una entrada?... si algo "picaresco" el amigo...pero sus necesidades y las de su familia eran extremas...

Dianna : me alegro que te guste, veamos si te animas a algo alusivo...

bipolar: es que era un poquito brujo?

Abejita de la vega: !antes el deber que la devoción¡ poquito a poco amiga...

Saludos

jg riobò dijo...

La cárcel propicia el escribir; hay multitud de ejemplos.